Cheers!! Kampai!! Prost!! Chin chiiiiin!!

Guía for Dummies de Supervivencia #2:
“Como sobrevivir a la Cena de Fin de Año y no morir en el intento”

Tanto la tradición de la cena de fin de año de la compañía, como el juntar plata para cada cumpleaños en la oficina se implementaron justo el año en que yo entré a trabajar (Ley de Murphy que le dicen). Pero yo humildemente pensé: “Pero que mierda! Encima soy nuevo y no me queda otra que participar, que hermosor de la reputa madre, pero la gente acá parece copada y decente, que tan malo puede ser?” .

Pero claro, cuando Citizen X peca de inocente, lo hace con todas las letras. Si bien en esa época éramos pocos empleados, lo malo era que había dos chicas embarazadas por lo cual el dinero a desembolsar para el “baby shower”era mayor. (queda terminantemente prohíbo imaginarse a Citizen X en un baby shower!!)

Y llegó fin de año y a mis compañeros (que no tenían otra cosa mejor que hacer) se les ocurrió que sería una MUY BUENA IDEA organizar una Cena de Fin de Año y por voto de todos contra uno (ahí Citizen ya empezó a mostrar la hilacha) la cena debía reunir las siguientes características “sine qua non”:

1º todos menos uno, querían un lugar “paquete”
2º todos menos uno, querían un lugar que ofreciera cena y show (no se conformaban con solo cenar, querían EL show)
3º todos menos uno, querían un lugar que después de la cena ofreciera baile (andaban desesperados por mover las cachas)

Así que terminamos en un lugar que se llamaba… mmm... jejjejee no me acuerdo como se llamaba... pero quedaba en Puerto Madero y nos costó un riñon y un ojo de la cara.

Apenas entramos notamos que el lugar no era muy grande y encima no tenia piso, o mejor dicho no se veía por la cantidad de mesas para 8 personas +/- que había amontonadas, sin embargo tenia una linda vista al río.

Yo estaba cagadísimo de hambre y encima tuvimos que esperar un montón a que sirvieran la comida en unas porciones insignificantes.

En la mesa de al lado había un “señor” sentado (por no decir despatarrado) con varias de sus “secretarias”, y lo recuerdo bien porque tenían un pedo atómico, eran mas quilomberos que la mierda, una de las chicas insistía en quitarse el top (“ah no puedo?! Entonces me levanto la pollera!”) y otra revoleó una botella (vacía) de MUMM sobre nuestra mesa, así que se imaginaran el desparramo de platos, cubiertos, copas y puteadas…

Así que las opciones de la noche eran:
* bancarnos a estas lacras de la sociedad que nos rodeaban
* tragar una cena desabrida y que con suerte te rellenabas una muela.
* reírte por compromiso y hacerte el asombrado por lo que hacia o decía el mago (recuerdan lo de cena y SHOW?),
* escuchar el interminable karaoke (la puta que mal que cantan mis compañeras!!)

Si sobrevivías a la cena, el show y el karaoke, te encontrabas con que te corrían las mesas (recuerdan que NO había mas espacio?) para dar lugar a la pista de baile, y ahí si… hasta que las velas no ardan!

Recuerdo haber ido al baño con la idea fija de “un pis y me rajo pa' mi casa”, y cuando quise volver las mesas ya habían sido movidas y tuve que desviarme por la pista de baile, ALTO ERROR, una de mis compañeras me agarró, al ver que yo me zafaba vino otra y me agarró también, yo trataba de consolarme pensando “ok... tranqui... son unos bagallos, pero no es tan malo bailar con dos chicas...”, pero de repente miro al costado y tengo un tipo (que no se quien era) bailándome encima (por no decir frotándose? o_O) y otro mas metiéndole mano a la más tetona de mis compañeras y que por simple proximidad la ligaba yo también.
Uds. pensarán “uuuhh!!!! looooco buenísima onda!! Que festichola!!”… pues NO, fue horrible, poco faltaba para que yo, un Citizen aún tiernito, saliera de ahí gritando con lagrimas en los ojos y pidiendo por mi mamá.

Es en esos momentos cuando uno se da cuenta que debería declararse ILEGAL las Cenas de Fin de Año, así como también ver a los compañeros de trabajo fuera del ámbito de la oficina.

Como verán, sobreviví para contarlo, pero la cicatriz aún no sana, esa fue la primera y última vez que fuí a una cena de fin de año, y tuve suerte por que éramos apenas 10 gatos locos y no estaban los jefes/gerentes.
Actualmente somos como 40 personas, mas los jefes/gerentes, mas sus respectivas esposas/acompañantes… así que ir una cena con esta gente podria considerarse como suicidio.

Por lo tanto, mi respuesta a la consigna: “Como sobrevivir a la Cena de Fin de Año y no morir en el intento” es… A JODERSE!!.
Yo sobreviví de pura suerte, porque como dice mi mamá: “Ay tesoro, vos tenés mas culo que cabeza” (que dulce mi madre, no?). Así que no tengo ningún consejo para uds, shouganai.

Felices Fiestas Soquetes!!

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